Muchas veces cuando analizamos por qué nos resulta tan difícil educar a nuestros pacientes, nos respondemos con muchas explicaciones:
Requiere mucho tiempo
No es rentable
Es difícil enseñarle algo a alguien que no sabe que lo necesita
El estilo de vida actual es muy vertiginoso y da poco lugar a la planificación
Es difícil modificar muchas de las actividades que nos generan placer
La mayoría de las personas no valora la educación
Los médicos no sabemos educar
No tenemos tiempo para educar
No nos enseñaron cómo hacerlo
No hay decisión política
etc, etc, etc,
Hace algunos años la Federación Internacional de Diabetes hizo una encuesta a los educadores en diabetes de distintos países del mundo y entre los interrogantes consultaba Quién educa? La respuesta fue contundente: los médicos, luego las enfermeras. Preguntó si el rol del educador es valorado y sorprendentemente los beneficiarios de la educación SI lo hacían. Saben quiénes fueron los que menos lo valoraron? Las autoridades sanitarias y los médicos! Cómo vamos a enseñarle a las personas con diabetes si somos nosotros mismos los que no estamos convencidos de que sirve? Leemos que la evidencia es contundente sin embargo … nuestros conocimientos no acompañan a nuestros actos médicos.
Esta es justamente la razón por la que comenzaremos a trabajar con los alumnos y docentes de la Universidad Católica de Cuyo, en este espacio de comunicación «virtual» para hablar sobre «educación para la salud», «educación en diabetes» , «tecnología de la información y de la comunicación, del aprendizaje y del empoderamiento», redes sociales y su aplicación en medicina.Esperamos les resulte interesante y podamos mostrarles una mirada diferente de encarar la educación.
Muchas Gracias a las autoridades de la Facultad de Medicina que nos abren las puertas y son tan receptivas a nuestras iniciativas, en particular a Dra. Margarita Mc Michael y Dra. Cecilia Farrero.
Nancy Carreño y Daniel Sternik